jueves, 28 de febrero de 2008

LA LOCURA DEL REY JORGE (1994). El monarca y la familia real deben ofrecerse, teatralmente, como modelo de felicidad. Epicuro, en el contexto de su ateísmo ético, encontraba un sentido y utilidad a todas las sagas mitológicas(¿el quinto elemento de la farmacia?). Los dioses, en su lejanía, se nos ofrecen como horizonte de referencia vital. Quizá no fundamento de ley o ciencia pero sí narración de anhelos, filias y fobias, drama y comedia.

Que así sea el circo de la política.

Conviene, por prescripción epicúrea, la mirada distanciada --- esos locos, al parecer recuperados, se nos ofrecen en el espectáculo de las elecciones.

Votaré, en serio, pero no tengo fuerza para animar a las jóvenes generaciones. Los vicios ( o las virtudes) mejor si privadas.


Hablando de política: ¿pudiera ser que LA DERECHA POLÍTICA concibiera hoy la filosofía, en tanto que materia de enseñanza, como trono de clasicismo y costumbre, ejercicio del pensar puro – o, mejor, del lujo; expansión conceptual según un canon definido por la tradición (más rito que otra cosa)?¿El último espacio verdaderamente conservador? Como la visita el día del Corpus a la tía Elisa y las pastas con vino quinado.

¿Y pudiera ser que LA IZQUIERDA POLÍTICA percibiera la filosofía como un acompañamiento clarificador y “práctico” de las ciencias sociales y del sistema legal ( la ciencia y la tecnología, el derecho y el ordenamiento político, el arte contemporáneo y la cultura pop)? ¿ Un apaño para dar cabida en la empresa ( la modernidad) a la vieja Dama, en este caso reconvertida en servidora útil y graciosa? Un eructo cuasi reflexivo de lo positivo o una eyaculación de impotente.

Pero todo es una exageración.

Quizás el culpable de la mala “folla” de la Vieja Dama Filosófica sea el loco de Sils-María: hizo que la única línea de pensamiento vivo sea impracticable por la escuela.



Hablando de modernidad. A veces pienso que Kant estaba equivocado de cabo a rabo y que lejos que acceso a la mayoría de edad, la modernidad ha implicado un proceso de involución de la especie en cuanto al espíritu – sin que ello me lleve a asumir crítica moral o censura. Pudiera ser que en la modernidad el espíritu adulto en potencia - según Kant - rejuveneciera y, a fecha de hoy, hayamos entrado en la niñez del espíritu. Eso explicaría las dificultades del pensamiento, la caída en el idealismo y otras trampas de las que soy incapaz de salir. Los siglos XVIII y XIX se me muestran teen agers. El siglo XX desvela los signos violentos y las grandes metamorfosis de la primera adolescencia. El siglo XXI o seguirá siendo adolescente primerizo o se desplazará hacia la infancia. De nuevo Nietzsche: la transformación del león en niño. Literalmente.

No ha habido ilustración, maestro Inmanuel.



viernes, 22 de febrero de 2008

AMORES PERROS Y LA FARSA DEL NIÑO PERDIDO CON UNIFORME DE SABIO OCCIDENTAL


AMORES PERROS(2000) . El viejo guerrillero y hoy asesino a sueldo se transforma; dialécticamente, un salto cualitativo en su regreso hacia el destino: los infiernos. La metamorfosis que convirtió al amoroso padre en terrorista y más tarde en viejo trapero, nos conduce ahora hacia el dios incitador de odios cainitas. Deja a los hombres el dios negro como a los perros en medio de la pelea o como aquellos otros españoles del grabado de Goya: Fijados al suelo y matándose a garrotazos.

Acaba el film adentrándose el viejo en la tierra quemada con su perro al fin nominado Negro ( el perro luchador herido por malas artes, paga cura y cuidado con holocausto de chuchos, viejos camaradas del chatarrero).


El amor perro es el amor veteado por la lujuria más peligrosa : la del poder ------ sobre todo la del poder frustrado en su contingencia. El amor perro convierte todo en grumo vomitado por los espasmos de la dialéctica -- concebida como método y visión del mundo en la frontera.



¿Cuánto tiene la dialéctica – como instrumento de pensamiento o modo y estilo – de lujuria mal curada? Aunque la virtud se ubique en la mesura (amor, eros platónico o método) siempre se deja tentar más por el exceso(la lujuria, la avaricia, la temeridad, la diletancia) que por el defecto ( la castración, la miseria, la cobardía o la callada).


JIM MORRISON presentaba en cierta ocasión su proyecto con la siguiente imagen. En el futuro posnuclear, un grupo de niños que recorre el país como auténtica massa perditionis - los únicos supervivientes de la barbarie bélica - encuentran entre la chatarra un viejo aparato de televisión. Los niños se acercan al cacharro y, sonriendo, hacen un alto en su peregrinaje. En torno al televisor algunos de los muchachos mayores (los que más recuerdos tienen del mundo anterior a la guerra) imitan lo que vieron en los antiguos programas, siendo ellos aún muy niños. Se improvisa una farsa en la que vuelve a aparecer ante los ojos humanos los programas de variedades y los telediarios, el concurso y los dibujos animados. Todo, desde luego, filtrado por la corta memoria de un niño que presenció hace tiempo aquello y que, posteriormente, ha sufrido el choque más brutal que puede soportar un hombre y un niño: la caída total del mundo, la fractura del espíritu. Sin embargo, este acto teatral es el inicio de un nuevo brote de la cultura. Imitación de algo apenas recordado y sin sentido, sólo reiterado por una vaga sensación de extrañeza (o sacralidad, si fuera el caso) y, a la vez, "aire de familia".

CODA. El asesino-chatarrero de la película de González Iñárritu dice, intentando explicar a su hija por qué la abandonó para integrarse en la guerrilla: “Papá quiso recomponer el mundo para poder ofrecérselo a su niñita y a la mamá. Como puedes imaginar no conseguí mi propósito”(la cita no es literal) . Ofrecemos el mundo a nuestros hijos en la escuela y la televisión. Seguramente les conducimos a la catástrofe siguiendo la estela de nuestros padres. Nuestros amores a los hijos son amores perros, veteados de lujuria por miedo a la miseria y, quizás, convertidos en grumos por la vieja dialéctica que más tarde los niños imitarán en su farsa (reinventando la gramática que no pudieron heredar, montándola sobre fragmentos, harapos y chatarra).

CODA. En ese espectáculo de los niños, en el cabaret de los niños peregrinos, ¿cómo representarían a la escuela?¿ Y a los profesores? ¿Y a la filosofía?.


Ejercicio para casa: represéntese la farsa en la que unos niños abandonados por la historia rememoran el rito filosófico y, desde ella, renázcase al saber dialéctico trufado de ironía. (Interrogante: ¿conseguirán esos jóvenes desterrar a los amores perros?)

martes, 19 de febrero de 2008

CÓMO CAMBIA TODO, HERMANO LOBO


Recién salido de la adolescencia - o en la ilusión de tal huida - un amigo me dijo que no había intelectuales "de derechas ni cristianos". La intelectualidad está unida con la lucha revolucionaria de la izquierda y la racionalidad filosófica nos comprete con el ateísmo, con el socialismo y la libertad de las costumbres. Todo lo demás es opresión, aceptación de la realidad sufriente: lo contrario del compromiso intelectual. El amigo, unos veinte años mayor que yo, era, sin duda, progre. Y ser progre me parecía, aún en los años ochenta, ser una cosa buena. Tenían los intelectuales progres una pátina de "intelectualidad" aún mayor que los "modernos", los chicos de la movida, grupo con el que comulgaba más en la praxis pero que me parecían culturalmente flojitos. Además los progres eran sexualmente muy abiertos.


Por los mismos años una mujer miembro del mismo grupo socioideológico se sorprendía de que en el Departamento de Filosofía hubiese "carcas", es decir, gente de derechas o no-progres. ¿No es la filosofía crítica, necesariamente comprometida con la contestación social o la revolución? ¿Se puede ser filósofo sin ser revolucionario?.


Hoy las cosas han sufrido un proceso de inversión. Muchos son los que consideran el "movimiento progre" la esencia misma de la vacuidad intelectual. El socialismo - sobre todo en la versión psoe - es caduco, totalitario por estatalista, doctrinario e impotente. Uno se sorprendería si en un departamento de filosofía hubiese otra cosa que la vanguardia liberal del pensamiento. El progre que fue -postmoderno mediado -, Gabriel Albiac, es espejo de evolución racional y crítica.


En los años ochenta creí que iba a morir en un "ataque preventivo de las URSS". Hoy sé que cualquier día mi afición a los grandes almacenes me hará volar por los aires de la jihad. Sería tonto creer que los misiles rusos apuntan a nuestros centros de diversión y desarrollo.Por Dios.


Todo esto da que pensar. Desde luego no creí a mi amigo progre porque yo era moderno a pesar de todo y , además, conocía ya a intelectuales que no eran progres (aunque sí modernos: eso les salvó del prejuicio ---- la cuádriga Pound, Céline, Jünger, Mishima). Aunque asumí la inevitabilidad del ateísmo respeté intelectualmente a los cristianos por influjo de algunos de mis profesores y de gente como Kierkegaard o el último Camus. Desde luego hoy me parecen papanatas los que sólo ven en los progres vacío intelectual ( o a los sumo el artisteo que apoya a ZP).


Pero esta conclusión es espuma. Lo realmente interesante del periplo es que en mis casi treinta años de vida activa en el orden del pensar, las cosas se han redefinido de un modo increíble. Si somos optimistas- y me suponen treinta años más de vida diletante - tal vez logre ver nuevos cambios y cabriolas de modas y certezas. Y eso es bueno. Como es bueno el escepticismo aunque sepamos en el inicio del periplo que no hay puerto de destino ni llegarán los bárbaros que nos sacarán del tedio y la trivialidad. No sé porque es bueno el escepticismo pero prefiero la tontería al dogmatismo. Y, puestos a decir necedades, oremos por la paz del mundo y el mantenimiento de la Unión Europea, para que pueda ver sin hambre ese futuro sorprendente -- digan a Dios en sus rezos que el grumo que genera el tiempo no me vuelva cínico y amargado, cincelado por el fuego fatuo de la historia.




jueves, 14 de febrero de 2008

AMOR, LUJURIA, DIALÉCTICA

Veo La Boda del Monzón en tan señalada fecha y, tras recomendar la alegre(¿agridulce? ¿miel-amarga?) película y todos sus cánticos y bailes, no puedo por menos de dejarme caer en la esperanza redentora del amor. Only love can break your Heart, que decía Neil Young.



Podríamos aventurarnos a postular que sólo el amor destruye la tragedia y la dialéctica toda, como bien decía Pablo de Tarso, rellenando los huecos que la existencia – que las mil existencias fuleras y mangantes que uno vive cada día – crean en nuestra memoria. El amor es la fuerza de la naturaleza cuando la Naturaleza es maestra; el fuego de la Historia cuando ésta fluye suave y generosa más allá de generales corsos y navajeros de largo alcance; la sangre de Dios hecho carne y preso en Guantánamo. El amor ---- dulzura, miel en el vino, concilio, fuerza para el padre y speed del deber marital.

El amor... pulsión, convulsión, LUJURIA.


Walerian Borowczyk The Beast (1977

Y cómo olvidarte, vieja dueña, que me acompañas desde los trece con esa larga y pegajosa lengua que llevó al santo a repudiar padre y madre, que hizo caer imperios. Lujuria incomprensible y torcida, superas la retórica – no la necesitas porque tu fuerza no arrenda aplausos ni golpecitos en la espalda ni campañas ni referendos ni justificaciones ni discursos. Lujuria, rendido me retiras del fogonazo – atado aún el collar con tu nombre a la cueva genital-cenital - y dejas abandonado cuerpo y alma en melancólico bucle. Y allí se piensa y se anhela ---- “ pero ¿no deseamos todos, en el fondo de nuestras sombras, acabar con ella?” – grita el súbdito que sueña con degollar al tirano que golpea la grupa de su libertad). Pero tú, lujuria, haces renacer la DIALÉCTICA y la vieja dama del pensamiento, siempre impotente – la dialéctica, la filosofía, es el eunuco de la lujuria - nos engatusa con su ascenso y en el agotamiento nace el AMOR, como pequeña vela, gusano de luz que se convierte en mariposa y en Joseph K, hombre, tú eres el hombre, le dice, oh amor, te celebro porque fundes el tiempo y vences dolor y muerte
Feliz San Valentín, hermanos pecadores

lunes, 11 de febrero de 2008

DE LA NÁUSEA Y LA PESADUMBRE O LA LUCHA


YO ME ACUSO:

He de confesar que YO, entre la ingenuidad y la confianza, apoyé la Educación para la Ciudadanía ... pero eso era antes de que la no nacida se convirtiera en el engendro que será esa asignatura reducida a una hora y que, a la postre, puede ser deformada hasta el extremo en los centros con ideario o ser directamente objetada desde “la ética (Sic,sic)” de los que se han adueñado del nombre hasta dejar a los otros, los que opinamos distinto, convertidos en malevajes doctrinarios, ideólogos de pacotilla, bolcheviques de cartón piedra. Yo me acuso porque creí en el papel (positivo) de la reflexión ético-política en la educación media y confiaba en que eso sería la EpC. ..... Hoy siento náusea. Náusea porque faltó coraje a unos y maledicencia otros, porque la escuela se ha convertido en instrumento de navajazo político. Maldigo a los puros y a los idiotas. Sobre todo caiga un rayo de ignominia en los ingenuos y los que tenían confianza. Penaremos cuando tengamos que hacer realidad la EpC y provoquemos risa (EpC: viernes, última hora).

Yo, confieso, desde mi experiencia en CTS, siempre he apostado por una asignatura de “introducción a los problemas, teorías y propuestas del pensamiento científico” más allá de los algoritmos matemáticos. La divulgación científica nos demuestra qué alturas de interés puede conseguirse. Pero esa Ciencia para todos no tiene por qué negar la filosofía ni la propia reflexión filosófico-social (v.g. CTS) sobre la ciencia.

(Yo, el más bobo, no caí en la cuenta de que estaba pidiendo un cambio en la propia estructura o filosofía del bachillerato (un bachillerato más de formación general que especializada, un bachillerato más amplio). ¡Pero qué tonto! Conseguida la nueva materia, ¿de dónde sacar las horas? Ni la lengua ni las matemáticas se pueden tocar – son el fetiche del éxito escolar. Parece ser que insistir en los análisis sintácticos nos convertirá en mejores lectores. Tampoco se tocan las optativas específicas. Ni la religión. Si aparecía la Ciencia para todos su espacio saldría de la tonta filosofía – renombrada filosofía y ciudadanía para así justificar más aún su mengua. Dios les cría y ellos se juntan. )

Yo,confieso, he considerado insoportable la actitud de la secta de los antipedagógicos. He de decir que la mayor parte de antipedagógicos que he conocido eran tipos dejados, pasotas de tiza –y- chicos, amantes de la copia y el apunte amarillo... Sin embargo, hay algo que falla en las bases pedagógicas del negocio. Hay razones para la antipedagogía. (Nota: ¿Por qué las administraciones socialistas, esas que se dicen herederas del regeneracionismo y la I.L.E. patinan tanto en sus reformas?¿Qué les falta?).

Me acuso de ser idiota...

Apoyemos a gente más sabia que yo

viernes, 8 de febrero de 2008



Para cualquier sistema educativo democrático, como viene señalando la UNESCO desde 1953, resulta básico dedicar un espacio suficiente a la reflexión sobre los contenidos aprendidos en el conjunto de las asignaturas, de modo que los futuros ciudadanos dispongan de la posibilidad de articular racionalmente esa peculiar cultura que les demandará su vida intelectual y laboral (política). Resulta por tanto necesario para un programa de universalización y conocimiento, que defienda la mejora y la calidad de la Educación, la existencia imprescindible de asignaturas en donde los estudiantes adquieran herramientas teóricas y contenidos específicamente filosóficos, asegurando así su adecuado desarrollo intelectual mediante la configuración, articulación y aplicación de los saberes científicos. Distintos sectores de la Sociedad quisiéramos transmitir nuestra preocupación ante la posibilidad de que uno de los pilares de nuestra tradición cultural se vea mermado por las distintas reformas educativas.

La aplicación de la LOE va a afectar, en general, a la posibilidad de una enseñanza integral y de calidad al devaluarse los contenidos más teóricos de la educación, como son los científicos y los filosóficos. Esto es debido a una orientación hacia la proliferación nada armoniosa de asignaturas optativas en el currículo. Arrastrada por esta inercia, esta reforma afectará a las asignaturas propiamente Filosóficas, alterando tanto los contenidos como la asignación de horas para su desarrollo. Frente a las actuales 2 horas semanales de las que dispone la asignatura de Ética, su sustituta, la Educación Ético–Cívica, sólo dispondrá en la Comunidad de Madrid de 1 hora. A la Filosofía y Ciudadanía, que vendrá a reemplazar a la Filosofía de 1º de Bachillerato, sólo le corresponden (a falta de la publicación del Decreto autonómico que establezca el currículo de Bachillerato en la Comunidad de Madrid) 2 horas semanales. Y la Historia de la Filosofía de 2º de Bachillerato se encuentra en la misma situación. Quizás ésta es la razón por la que la Comunidad de Madrid ha comunicado a los sindicatos que este año no prevé ofertar ninguna plaza para la especialidad de Filosofía.

Esto significa que las asignaturas obligatorias vinculadas a la Filosofía podrían ver reducida su carga horaria en una proporción importante, además de ver recortado su contenido más propiamente filosófico. No obstante, a la espera de que la Comunidad de Madrid cumpla con su compromiso educativo, en el momento de la determinación del 35 % del currículo que le compete, requerimos que apueste por una enseñanza de calidad, de manera tal que mantenga las horas necesarias para el desarrollo de los contenidos específicamente filosóficos.
Expuesto lo anterior, solicitamos de la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid (a la que corresponde el establecimiento definitivo del currículo del Bachillerato en esta comunidad autónoma) lo siguiente:

a) Que la asignatura de Ética de 4º E.S.O. vuelva a contar con sus dos horas semanales de clase. La situación de la Educación Ético–Cívica, con sólo una hora semanal de clase, hará casi imposible un tratamiento de los problemas que no consista en un adoctrinamiento ideológico. Esto, con independencia de cualquier posible característica interna de la asignatura, se debe sencillamente al poco tiempo del que dispondrá: con una hora a la semana será materialmente imposible intentar articular reflexivamente en clase las distintas Teorías Éticas y su fundamentación filosófica.

b) Que la asignatura de Filosofía y Ciudadanía conserve las tres horas semanales de que dispone la Filosofía actual: Los contenidos mínimos establecidos en el currículo de Bachillerato requieren un tiempo suficiente para dotar a los alumnos de las herramientas conceptuales mínimas para articular la reflexión teórica exigida. La permanencia en el currículo de un bloque destinado a la introducción general a la filosofía, junto a los bloques específicos de filosofía política, hace que sea indispensable contar con esta tercera hora en 1º de Bachillerato.

c) Que la asignatura de Historia de la Filosofía cuente con cuatro horas semanales de clase: De entre todas las asignaturas de las que los alumnos tienen que examinarse en la P.A.U., Historia de la Filosofía se encuentra en una situación desfavorable, pues dispone únicamente de 3 horas semanales para su desarrollo frente a las 4 horas de las que dispone el resto. Frente a este clamoroso agravio comparativo se hace necesario disponer de 4 horas semanales para su desarrollo.
Solicitamos, en definitiva, el apoyo de todos: de los profesores, que saben de la importancia de un exigente nivel de contenidos, de alumnos, madres y padres, de las Administraciones Públicas y de todo ciudadano conocedor de los requerimientos de una cultura democrática. Pues no reclamamos sino los medios y la organización necesarios para la formación científica y teórica de los ciudadanos cultos que nuestra sociedad reclama.
(nota. Parece que el Manifiesto ha sido propuesto desde la Comunidad de Madrid. Sin embargo sus objetivos son exactamente aceptables desde otros lugares. Por eso los seres vacíos muestran su apoyo a estos mundos habitados por la justa reivindicación. SALUD Y LIBREPENSAMIENTO)

miércoles, 6 de febrero de 2008


Y si la ira dejara vía libre a la memoria - pues la ira no impide el pensamiento pero sí bloquea toda sensibilidad y dulzura en el mismo - podría acercaros a mi paseo por el río Arlanza, en aquel verano lejano en el que por vez primera intuía en mi carne (vía pulmonar) que el gran gozo era posible.

Pero la ira no me deja, hermanos, y sólo puedo deciros que en aquel mismo momento M. se despeñó un par de metros mortales por intenar atraer a hembras hermosas a su cubículo de humedades placenteras.

La ira no deja, no, y por eso construimos carcharros - poemas, tesis, canciones y sinfonías - que cristalizan en objeto o grumo la sombra de esas experiencias que la narración no alcanza (pues la ira agarra con fuerza sus tobillos como la amante despechada en el amanecer o la vieja calavera de las danzas negras). ¡Ay, si la memoria pudiera entregarse y proyectarnos a todos en aquel viaje en colchoneta por el tranquilo Arlanza, los ojos cerrados por el humo y la burbuja del colorín!

Os entrego esta cancioncilla del White Bird encerrado en la cárcel dorada... Y no olvides que It´s a beautiful day.





lunes, 4 de febrero de 2008

QUE TODO ES NAVAJA Y TONTERÍA. FIN DE LA FILOSOFÍA


Al hermoso pluralismo de la blogosfera y al diálogo que nos hermana




Cada vez me quedan más lejos ciertas ingenuidades que ejecuto día a día por hábito e inconsciencia. Esta circunstancia me empantana entre el cinismo y la idiotez, mezcla imposible en la que nadie creería si no fuera evidente su presencia (por ejemplo, en las clases de ética y filosofía)

Se dice que "el diálogo es el eje vertebrador de la actividad pensante "y, sin embargo, no percibo en el mundo de la discusión – experta o contertulia - apertura a opiniones diversas a la propia salvo para encontrar defectos, debilidades y huecos por los que penetrarán la faca y toda su herrumbre. Una vez que nuestro espíritu primordial se asienta no hay argumento que desborde el vocabulario que lo blinda. La apertura es sólo el gesto inicial para encontrar en el menor número de movimientos la victoria ( o mejor: la derrota del adversario). Los vocabularios, todo lo más, se amplían en sus términos con la atención a las ideas (o lenguajes) de otros para así conseguir la desecación de aquellos que nos prestaron los nombres. Quizás por eso las grandes cuestiones siguen milenio tras milenio calentándonos la cabeza . La popular tesis de Naomi Klein sobre las tendencias que nacen en los márgenes para, adecuadamente “logo-tizadas”, acabar enriqueciendo aún más a los centros financieros, parece responder a una lógica más profunda del sistema. No hay apertura, pues, nada convence a nadie para salir del castillo en el que recrea la cartografía del mundo a partir de las manchas de sus locales humedades

Otro tanto sucede con la célebre tesis:la violencia no conduce a nada”. La mirada – sincrónica o diacrónica –niega con tanta fuerza esta idea que las celebraciones del Día de la paz y todos los esfuerzos por convertir a los medios pacíficos y la no violencia en núcleo de discurso ético-pedagógico-transversal no nos ruborizan hasta la implosión porque trabajamos al margen de la autoconciencia y en el opio de la alienación. La violencia – si es de nuestro bando la denominamos fuerza o firmeza – construye en el maravilloso mundo de la transmodernidad y las TIC con tanta vigencia como en los campos embarrados de la Guerra de los Treinta años – periodo que siempre he considerado sombrío hasta la médula (por ello nace de él el bueno y alucinado de Descartes) -; eso sí con kilos de maquillaje y palabras.

Por ello sólo la inutilidad de la narración ( o la narración inútil en cualesquiera de los géneros), el alejamiento de nuestros vocabularios de la Verdad, el Bien, la Justicia, la Responsabilidad,..... el Compromiso, la Participación .... nos puede abrir un espacio de alivio o esperanza(entre el eructo y el parto, con mil y principios de precaución en este último caso). Quizás – yo opino – sólo la conmiseración y la ternura sin palabras ni "filosofías" hacia las cosas pudiera ser criterio u horizonte (absolutamente blando).

Claro, si alguien estima esta reflexión inmoral y ofensiva, insolidaria porque abandona el mundo a su suerte y apoya una drogadicción del pensamiento, no puede creer ingenuamente que el diálogo es el núcleo del pensar y la violencia no conduce a nada.

viernes, 1 de febrero de 2008

CONFESIONES DE LA ESCRITURA CONTADAS POR SU HERMANA LA IMPUDICIA

Me ocupa la escritura como actividad.
Unos minutos en toda una vida no pueden considerarse mal gasto. No es obsesión.

Antes escribía en cuadernos con cubiertas negras, hoja-blanca-tamaño-cuartilla que compraba en un librería de Salamanca. Pero nunca me gustó mi letra. Me delataba. Desnudaba en el trazo regordete la impostura, el timo y el sacrilegio. Además Paul Auster me hizo odiar los cuadernos.

Una vez, cuando tenía alrededor de treinta años, quemé todos los cuadernos que conservaba desde los trece o catorce. ¡Mis primeros poemas, las primeras chispas tras la lectura de Jim Morrison, Rimbaud, Baudelaire, Nietzsche y los Presocráticos!. Me sentía Kafka destruyendo su obra. Alcancé la gloria por ósmosis gracias a Frank. Lástima que fuera un acontecimiento secreto. Las mejores cosas que he hecho - por ejemplo, fecundar óvulos o destruir cuadernos - han sido performances privadísimas. En cualquier caso: todos aquellos pensamientos se perdieron en el fuego. El acto aniquilador – "mi” biblioclasmo - es un buen ejemplo de cómo una actuación idiota puede tener un buen destino: hoy tengo más espacio en casa.

Pero quería escribir de la escritura. Veo como (ella) se derrama por esta página en blanco. Luego la convertiré en vistosa entrada de blog. Potencialmente se abrirá a millones de personas que entienden el idioma español. Me siento fructífero, fecundo. Todo un machote. Hace un rato escribí en el blog que se hace llamar Antes de las cenizas. Me imagino joven al ente que está detrás de la blog . Yo no soy joven. Pero ¿a dónde íbamos? A ninguna parte. Sigamos.

Me ocupo de la escritura. Es un lujo de pobres con pretensiones, de los hijos de la clase obrera y obreros ellos que aprendieron a leer y no se pusieron el mono ni se mancharon las manos con grasa o barro. Su trabajo es alienante pero calentito. Miran como besugos a adolescentes. Un día quisieran tener dieciséis años para ligar con jovenzuelas sin dar el cante y otros anhelan hundirse en la vejez como Alicia a través del espejo. La escritura es un lujo, de veras, como quitarse los calcetines por la noche o tomar un zumo en el momento apropiado. O fumar un cigarrillo cuando se ha dejado de fumar.

La escritura: “Para escribir lo primero es tener algo que decir” – decía y escribía yo en el pasado. No lo sé. Para escribir lo primero es escribir.


Estos días he sometido a los alumnos a la lectura de Mundo Feliz. Mis dos personajes favoritos de la novela son Lenina y Helmholtz Watson. Éste último es un escritor (ingeniero emocional) que redacta consignas y frases útiles (pedagógicas) para el sistema pero siente unos rebeldes deseos de escribir poesía. Sin embargo, el pobrecito - dada su vida feliz en el Mundo feliz -, es incapaz de escribir nada profundo. Escribir sin tener nada que decir.


¿Quién es capaz de escribir profundo? La profundidad, en la escritura y en la vida, es un mito (dice el maestro Rorty).



Escribir para nada. Palabra tras palabras. Todo esto es un ejemplo. Por supuesto nada de lo que escribo lo suscribo ya. Mi verdadera y profunda opinión se quemó cuando destruí los cuadernos el día cumplí los treinta y me levanté sin fama ni gloria. Es decir, convertido en un monstruoso insecto. Te has perdido mi mejor cara, lector. Si es que existe...

Sobredosis de letras: ella,ella eh,eh