martes, 3 de febrero de 2009

BICEFALIA (3). LA GESTIÓN DE LA INCOHERENCIA A TRAVÉS DE LA QUIEBRA (O BICEFALÍA)


“ Se dice que el pensamiento debe convertirse en acción; hay que ser consecuente y vivir según la verdad reconocida como tal. Ahora bien:¿no acabará produciendo una autocensura la imposición de este principio? Al final, uno sólo se permite pensar lo que cree poder vivir; o por el contrario: por el hecho de haber sido pensado, hay que vivir algo a cualquier precio, incluso el de la destrucción. En el primer caso, se malogra el pensamiento radical; en el segundo se sacrifica al pensamiento puro la amalgama de la acción viva. ¿No habría más bien que separar pensamiento y acción respectivamente para que cada uno alcance su derecho y su verdad? Spinoza dijo en cierta ocasión más o menos lo siguiente: “Sólo puedo pensarlo todo, si no lo debo hacer todo”. Si queremos proteger al pensamiento radical de los compromisos de la acción y a éstos del pensamiento radical, hay que renunciar de hecho a la consecuencia

(
Rüdiger Safranski, de su libro sobre Schopenhauer y los años salvajes de la filosofía
)

1 comentario:

Luna Miguel dijo...

los detectives salvajes de la filosofia