miércoles, 25 de marzo de 2009

bucle místico y espejo de Boulesis

( Viene de la nota 2 del día de ayer o es la nota 3 al día de ayer o es nota al ayer del ave boulésica o comentario de la metamorfosis de Nina Hagen en Böhme transformada)

¡0h maravilla de metamorfosis! Estaba allá y, en fin, me creí aquí ( o me creí allá y estaba aquí). La blog rompe sus barreras espaciales y allí, en la casa Boulesis, uno se siente en casa. Y casa es Wandeland25... y otros (muchos o pocos) sitios donde recala la tortuga, donde el pie de página es cuerpo de texto. Esto es la familiaridad.

En todo caso, fluctúan los espacios (el "éste" y el "aquél". Pensemos en la ambigüedad de la frase: "Ésta refleja a aquella y aquella refleja a ésta". Cuestión: ¿a quién se refiere el segundo "aquella" del enunciado, ¿a "ésta"? ¿"aquella se transforma en "ésta"?.).

Los bucles de identificación - el allá es el aquí - no son fruto del azar si tal cosa significara cierre de la investigación, abandono de la sorpresa a la sorpresa por afán de gozo que sólo buscara el vértigo de la montaña rusa. Ahora bien: si el azar "es el nombre de nuestra ignorancia" y de la pasión (por la escritura, por ejemplo, o por la existencia, quizás), el bucle no teme ser hijo del azar. Si es asumible la cita de Wittgenstein - "No cómo sea el mundo es lo místico,sino que sea" - la coincidencia( del allí en el aquí) es familiaridad en la experiencia. Y ya se sabe: la familiaridad es siempre tarea de faunos, demiurgos y silenos; obreros del azar y patinadores que quieren poner freno - cifra y medida - a la sorpresa sin abandonar por completo el impulso y el viento en la cara .

(Al vent,
la cara al vent,
el cor al vent,
les mans al vent,
ells ulls al vent,
al vent del món)

salud - os

No hay comentarios: